La enfermedad de Párkinson. Cómo podemos ayudarte.
29 agosto 2020 | en Fonema., Logopedia, Psicología, Terapia Ocupacional
El Párkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa con más prevalencia, por detrás del Alzhéimer, en la actualidad. Puede aparecer antes de los 50 años, y sus síntomas pueden variar. Por ello, es necesario realizar un diagnóstico precoz, y comenzar un tratamiento interdisciplinar lo más pronto posible.
Al pensar en Párkinson, nos viene a la mente una persona mayor, cabizbaja, con un temblor considerable en las manos y en la cara. Nada más lejos, esta patología neurodegenerativa conlleva una multitud de síntomas variados, sin tener que llegar a los más «típicos». El Párkinson se caracteriza por la pérdida (o degeneración) de neuronas en la sustancia negra de la parte media del cerebro. Esto provoca una falta de dopamina en el organismo, necesaria para la información de realizar los movimientos con normalidad. La falta de dopamina conlleva la pérdida de control del movimiento, viéndose los síntomas motores típicos, como el temblor en reposo o la rigidez.
El Párkinson fue demostrado por la publicación de un ensayo clínico del Dr. James Párkinson en 1817, donde lo describía como «parálisis de sacudidas». Desde ese momento, se han ido realizando estudios sobre la enfermedad, junto con varias investigaciones buscando el mejor tratamiento. A día de hoy, se sigue investigando y mejorando en la búsqueda de una mejoría en el paciente, ya que la persona no fallece por esta enfermedad, sino por el avance de sus síntomas.
Su edad de aparición suele ser entre los 50 y 60 años, siendo mayormente a partir de los 65 años, tanto en hombres como en mujeres. Pero se ha visto un aumento en personas menores de 50 años. Su presencia tiene un alto porcentaje de aparición esporádica, aunque hay un 25% de base hereditaria.
Los síntomas más frecuentes que suelen aparecer en estas personas son:
- Síntomas motores: rigidez, temblor en reposo, bradicinesia (movimientos enlentecidos), falta de estabilidad postural, dificultades respiratorias, disartria (disficultad en los movimientos orofaciales), falta de expresión facial, hipofonía, bradilalia (disminución de la velocidad del habla).
- Síntomas no motores: alteraciones del sueño, disfagia, trastornos emocionales, demencia, fatiga, trastornos del contrtol de impulsos, alucinaciones, pérdida de peso…
En esta infografía tenéis más información sobre las 10 señales de alerta del Parkinson http://www3.parkinson.org/site/DocServer/Spanish_10_EWS.pdf;jsessionid=00000000.app30118b?docID=203&_ga=2.94142612.808906421.1596971048-1891026387.1596971048&NONCE_TOKEN=7500AA39D0C964B6861D1C202BE60002
El diagnóstico se realizará por un equipo profesional de la medicina de la neurologia, la que expondrá un tratamiento farmacológico adecuado al paciente. Pero, además, es necesario que la persona reciba otros tipos de rehabilitación para intentar mantener la enfermedad a raya. No hay una cura definitiva para ello, pero se puede llegar a ralentizar y mejorar algunas de las alteraciones.
En Fonema, contamos con profesionales que pueden realizar un tratamiento de neurorrehabilitación adecuado para cada paciente. Dentro del tratamiento, debemos tener presente la fisioterapia, la medicina, e incluso algunas veces la rehabilitación visual. En nuestro centro contamos con logopedia, psicología y terapia ocupacional que mejorará las distintas alteraciones.
- La logopedia, atendereá los problemas de habla (tono, velocidad, volumen), respiración, deglución, expresión facial y la escritura.
- La psicología, se realizará un tratamiento de estimulación cognitiva, junto con la mejora de las alteraciones emocionales y de conducta.
- La terapia ocupacional, la estimulación sensorial juega un papel fundamental, además de ayudar a mejorar en las actividades de la vida diaria y el mantenimiento de las funciones cognitivas.
Si usted o algún familiar ha sido diagnosticado de Párkinson, no dude en acudir a nuestro centro para resolver sus dudas.